Como docente, lo primero que debo decir es que desde mi punto de vista nuestra formación ha de ser continua pues, a pesar de haber estudiado una carrera, así como los distintos cursos que se te piden para poder impartir la docencia, sin embargo estos versan sobre conocimientos teóricos que, una vez entras en el aula, de poco te sirven si no eres capaz de garantizar una buena enseñanza, y esta parte de la praxis diaria, del conocimiento de las distintas situaciones de los alumnos, motivo por el cual, aparte de enseñarles a conocer lo que ellos en pleno siglo XXI pueden encontrar en internet, hay que enseñarles a re-conocer cómo son y cómo pueden aprender. Por ello, esto es lo primero que me ha enseñado este curso que, si bien mi intuición siempre me ha guiado por este camino, me he dado cuenta de que los verdaderos conocimientos los he adquirido, no solo gracias a la lectura y realización de las distintas actividades, sino también gracias a las experiencias de todos aquellos compañeros que, como yo, quieren poder enseñar a aprender, lo que supone emprender un camino que iremos haciendo para ellos y con ellos, nuestros alumnos...
Por último, y como suelo decir siempre, este curso representa para mí el índice del libro que, a partir de aquí, deberé escribir con la mejor de las competencias que he podido adquirir, la de aprender a aprender.
Si existe el TDAH o no sigue siendo un misterio, pero trataré de resolverlo...
